domingo, 18 de octubre de 2015

¿Creer o no creer?

Hoy os vengo a escribir una de las entradas más personales que he hecho hasta ahora. Espero que solamente os quedéis con la parte positiva, porque quiero creer que a pesar de todo, esta entrada acabe bien.
Durante toda mi vida he recibido críticas; críticas de mis compañeros de clase, burlas de "amigos" que se quejaban de mi personalidad, críticas de personas que se creían con derecho a infravalorarme aún sin ni siquiera dignarse a conocerme, incluso he recibido comentarios ofensivos por parte de mis padres. La mayoría de ellos siempre han venido de personas que quería o que por lo menos creía conocer. Muchos de ellos me han hecho sentirme una mierda, así de claro. Otros, han logrado que no solo me sintiera así, sino que también me lo creyese. Incluso he llegado a hacerme daño, físicamente y psicológicamente, por no llegar a ser lo que los demás querían,  
Siempre he pensando que algo tendría que haber malo en mí, no os hablo de los simples defectos que (todas) las personas tenemos, sino de algo mucho más grande. Llegué a pensar que yo como tal no existía, porque la imagen que los demás me daban de mí misma no se asemejaba a lo que yo siempre había creído ser. Todos los comentarios, las críticas y burlas parecían estar enfundadas en algo sólido y cierto. Hubo un momento donde ni siquiera fui consciente de lo que era real o no. 
Siento que toda mi vida he tenido que superar no solo obstáculos, sino personas, y no hablo en el sentido de creerme mejor que ellas o considerarme superior. Más bien me refiero a la necesidad de contentarlas, de hacerles cambiar la opinión que tenían sobre mí. Cada vez que intentaba lograr algo, que intentaba alcanzar una meta, me sentía como una actriz encima de un escenario. Sin embargo, no me esperaban aplausos al final de mi obra, sino miradas de reproche, horror, tristeza, enfado...Parecía que no conseguía hacer nada bien para ninguno del público. Y lo peor de todo, es que yo misma los había invitado.
Con el paso de los años me fui sintiendo cada vez más pequeña, era como estar rodeada de gigantes, de personas que alcanzaban lo que querían y nadie las criticaba. Eran capaces de recibir aplausos, esos aplausos que yo no creía merecerme. ¡Qué equivocada estaba! Todo el mundo recibe críticas, puñales en la espalda que no se esperan, agonías que parecen atravesarles el pecho...La mayoría de esos gigantes eran así porque habían sabido pelearla, habían conseguido creer en ellos mismos y a partir de ahí, habían dejado que la gente tomase la decisión: creer o no creer. Y fuese cual fuese la respuesta, la persona iba seguir teniéndose a él/ella mismo/a. 
No sé qué fue lo que pasó, no sé quién o qué me hizo cambiar, pero sentí un pequeño click en mi interior. Ya no quería ser esa pequeña entre gigantes, tampoco sé si estaba dispuesta a ser un gigante, simplemente quería ser yo, con mis imperfecciones, pero también con mis virtudes. Y fue en ese momento cuando empezó un cambio que hoy en día sigue. Me propuse pelear, pero por primera vez, mi lucha no era con los demás, era conmigo misma. Me busqué, aún sigo haciéndolo y creo que es lo más bonito que te puede pasar en esta vida; que a pesar de perderte en numerosas ocasiones, sabes dónde buscarte. 
He aprendido a que las críticas, los comentarios ofensivos, y sobre todo, la gente que le gusta dedicar su vida a eso, siempre van a estar. Lamentablemente, esas personas, por equis motivos, se han propuesto ser destructivas, y lo peor, es que no solo se lo están haciendo a los demás, sino también a ellas mismas. Puede que llegue el día donde el karma se lo devuelve, o puede que no, pero eso ya no está ni en mis manos, ni en las tuyas. En tus manos está en volverte fuerte y el empezar a creer que nadie, JAMÁS, debe hacerte sentir pequeño, porque todos hemos sido alguna vez alguien en la nada, todos hemos tenido que pelear por formarnos una personalidad y una vida, y porque ya se encargará ésta de darte bastantes palos, como para dártelos a ti misma. 
Soy consciente que sigo siendo esa niña/mujer que trata de encontrase cada día, esa chica que intenta superar sus inseguridades, pero siento que poco a poco voy dejando de sentirme pequeña. JAMÁS, NUNCA, dejes de creer en ti, en tus posibilidades, en tus habilidades...Explora, ríe, sueña, llora, busca nuevos retos, afronta los problemas, busca un nuevo camino...HAZ LO QUE QUIERAS EN ESTA VIDA, PERO INTENTA CON TODAS TUS FUERZAS, Y SI NO SON SUFICIENTES, CON LAS DE LA BUENA GENTE QUE TIENES A TU LADO, EN NO SENTIRTE NUNCA MÁS PEQUEÑO/A. 

Rosa

domingo, 4 de octubre de 2015

Una propuesta...¿Indecente? ¿Inocente?

¡Hola! ¿Cómo va el fin de semana? Mañana lamentablemente ya es lunes :(, pero bueno, aún nos queda la tarde del domingo para disfrutar de la tranquilidad y compañía (o soledad) que un domingo trae.
Hace mucho tiempo, desde que me abrí el blog más o menos, se me ocurrió una idea. Me gustaría abrir una entrada por y para vosotros/as. Sí, sé que no tengo muchos seguidores (ni muchos comentarios ejem, ejem), pero por las visitas que veo en el blog, sé que alguien me tiene que leer. O puede que sean mis mejores amigas dándole todo el rato a la misma entrada...¡No creo! Seguro que tienen algo más interesante para hacer...Bueno, a lo que iba. En esta entrada no voy a publicar ningún pensamiento mío, ni tampoco sentimiento, aunque a medida que iba escribiendo se me ha ocurrido una acerca del día domingo, pero creo que lo dejaré para más adelante. Como podéis apreciar, me voy mucho por las ramas.
Ahora sí, quiero que me mandéis muchos mensajes, porque ya que hago algo para vosotros...¡Es broma! Podéis dejar lo queráis. Bien, esto consiste en lo siguiente. Tenéis la total libertad de preguntarme lo que queráis, sobre moda, amor, amistad...El tema os lo dejo a vuestra elección. Pueden ser cosas sobre mí o puede ser cosas sobre vosotros/as y queréis tener una visión objetiva sobre el asunto. Yo voy a responder todo, pero eso sí, desde ya os aviso que los insultos o las preguntas ofensivas, las descartaré. Con esto quiero decir, que más adelante haré una entrada el blog para que conozcáis las respuestas a vuestras preguntas, así que o bien podéis mandarlas como anónimos o podéis poner vuestro nombre. Como veis, os dejo total libertad.
Puede que esta idea no funcione (me pondré triste y lloraré jaja), pero me parecía interesante planteároslo.
Podéis dejar vuestra pregunta en comentarios o mandarla a este correo: itismymagicworld@gmail.com
Antes de despedirme, quiero aclarar que esto no es por hacerme de más ni mucho menos, simplemente daré mi opinión y contestaré de la forma más sincera posible. Podéis leer las respuestas o ignorarlas. En definitiva, todo esta propuesta es a vuestra elección, pero me haríais muy feliz participando.

¡Nos leemos pronto! 


lunes, 28 de septiembre de 2015

¡Qué ya llega!




















Parece que fue ayer cuando todavía íbamos con pantalones cortos, camiseta de tirantes y sandalias por la calle...Espera, prácticamente hace dos días íbamos así, por lo que esta frase por primera vez parece tener sentido literal.
Hoy me he levantado tarde, ventajas que tiene una por no tener Universidad los lunes, ese día infernal que nos dice que tenemos que volver a la rutina, después de pasar una maravilloso fin de semana. He abierto la ventana de mi habitación para encontrarme con un cielo totalmente nublado, amenazándome con una gran tormenta. Y lo que puede ser poco habitual en una persona, no he me sobrecogido al verlo, sino que he mirado al cielo con una sonrisa. Me encantan los días lluviosos, me encanta el invierno y todo lo que éste implica (ropa súper bonita, botas de agua, días de relax con un buen libro en una mano y un café/chocolate calentito en la otra, días de amigas/os en los cines, en cafeterías...). Aunque parezca que el invierno, con sus días lluviosos y nublados, nos puedan quitar la alegría o las ganas de crear miles de planes con tu gente especial, eso no es así. La alegría es un estado de ánimo que la persona proyecta, así que si no te gusta el invierno como a mí, intenta buscar algo que te produzca esa sensación de euforia y entusiasmo. Si crees que no se puede crear ningún plan interesante cuando está lloviendo, crea algo que salga fuera de normal, maravíllate con los pequeños detalles, aprende a disfrutar del simple contacto con la gente...
Vale, sí, puede que mi gusto por esta época del año esté nublando mi juicio y mi escrito, pero es que siento que se acerca un momento especial. Todo esto no quiere decir que no disfrute del verano, ¿quién no lo haría? Tenemos vacaciones, podemos hacer millones de planes al aire libre, viajar, quedar con tus amigos/as, disfrutar de un buen día de playa...¿No os dais cuenta? Son planes, que en definitiva, se pueden hacer en cualquier estación del año. Bueno, puede que no todos, pero en su mayoría sí. O pensadlo de esta forma, el verano es una época donde se crean recuerdos, anécdotas, momentos brillantes que tenemos en nuestra mente y estamos ansiosos por poder contárselo a los demás, entonces, ¿por qué no le damos esa importancia también al otoño/invierno? Busquemos lo mejor que nos pueden dar estas estaciones, indaguemos en ellas, intentemos quererlas..., igual nos sorprenden, puede que incluso también lleguemos a estar deseosos de querer contar nuestras batallitas. Y es que la vida son estaciones, tenemos esa espléndida primavera, que la sangre te altera, que te llena de luz, que te ofrece visiones tan hermosas como alucinantes; tenemos el verano, esa época donde todo el mundo parece feliz, donde ves a la gente sonreír (más a los que tienen vacaciones), donde eres capaz de reencontrarte con personas que hace tiempo no veías; también tenemos al otoño, que parece que nos permite captar fotografías tan bonitas que solo pensamos en publicarlas en cualquier red social, podemos ver colores tan maravillosos cuando está atardeciendo, pero aún así a veces no logramos ver toda su belleza; y llega el invierno, el temido por muchos y el querido por pocos. El invierno nos da nuevamente fotografías maravillosas, lugares donde la nieve crea un efecto tan hermoso que es capaz de opacar al sol más resplandeciente, nos permite disfrutar el esquí, un deporte que mueve a millones de personas hacia las zonas más heladas y nevadas...
En definitiva, esta entrada no está escrita para que empecéis a sentir lo que yo siento en esta nueva estación que está a punto de llegar, tampoco intento convenceros de nada, aquí cada uno leéis lo que queréis, en el momento que queréis. Solo os pido, bueno, mejor dicho os aconsejo, que disfrutéis de todas las estaciones del año, que aprendáis a buscar lo bueno que cada una de ellas tiene. ¡¿Quién sabe?! Igual en algún momento, me contáis alguna anécdota que el invierno/otoño/primavera/verano os ha dejado.

¡Qué tengáis buen inicio de semana! :) 

sábado, 26 de septiembre de 2015

Echar de menos...

¡Hola! Sé que ha pasado una semana desde que subí la última entrada, pero entre las clases, mi tiempo libre y la falta de ganas por expresar lo que siento (muchas veces creo que son cosas muy personales), no he podido escribir ninguna entrada. Pero hoy es el día, ha llegado el momento de compartiros un sentimiento que he experimentado mucho durante estos días y que considero que cualquiera puede sentir en algún momento de su vida hacia cualquier persona, lugar o momento.
¿Qué significa echar de menos? ¿Qué es lo que realmente se siente cuando echas en falta algo? ¿Es doloroso? ¿Es bonito? ¿Es diferente para cada persona? Estas y muchas preguntas más, seguro que se os han pasado por la cabeza, o por lo menos, sabéis de qué os hablo cuando leéis la expresión echar de menos...
Durante estos días, yo he echado de menos lugares, sitios a los que he ido con mis amigas, con mi familia; lugares, que por un motivo u otro, me han maravillado, me han enamorado y me han hecho vivir experiencias inolvidables. También he echado de menos momentos y creo que esto es más difícil que lo anterior, porque cuando vives algo con una persona, que encima te ha echo feliz, y ya no lo tienes, parece que el corazón se te comprime y es que hay muchas cosas que nos pueden hacer recordarlo. Y ahora viene lo que para mí ha sido más difícil, el echar de menos a las personas. Pienso que a veces está bien, yo he echado de menos a mis amigas de la Universidad en verano cuando no las he visto, he echado de menos estos días a mis amigas de toda la vida porque aunque he hablado con ellas, siento las ganas inmensas de abrazarlas y poder compartir experiencias y anécdotas con ellas...Bien, todo esto me parece maravilloso, es más, creo que cuando nos encontramos ante una situación así es necesario decirle a esa persona o personas, "te echo de menos", "te extraño" "tengo ganas de verte", porque expresan un sentimiento bonito, sí, ya que no se trata de echar de menos a alguien que ya no tienes en tu vida, sino de echar de menos a personas maravillosas que tienes en tu vida y que sabes que a pesar de la distancia, del tiempo o de las peleas, puedes seguir contando con ellas y emocionándote cada vez que las vuelves a ver. Por eso os recomiendo que digáis "os echo de menos" "te echo de menos", porque hay personas por las cuales merece la pena decir esas palabras. Pasa algo parecido con la palabra te quiero, pero eso ya se merece otra entrada jaja.
Lo difícil, o por lo menos lo es para mí, es cuando echo de menos a alguien que ya no tengo en mi vida. Esto puede haber pasado por muchas razones, igual esa persona ya no está con nosotros y aunque entendemos (o lo intentamos por lo menos) que en la vida tenemos que despedirnos de ciertas personas, esto es mucho más duro cuando el lazo emocional que tienes con él o con ella es fuerte. Cuando pienso en este sentimiento, se me vienen a la cabeza a mi abuelo, que hace poco que se fue y aunque lo recuerdo con una sonrisa en la boca por todos aquellos momentos que me regaló, no puedo evitar echarlo de menos. Respira. Cierra los ojos. Recuérdalo. Sonríe.
Y por último, están esas personas que por un motivo u otro, has tenido que cortar con ellas y a pesar de todo, sigues echándolas de menos. Y aquí es donde quería llegar. Echar de menos a alguien con quien has compartido tantas cosas, tantos momentos, hace que sea más difícil olvidarla y por tanto, dejar de extrañarla. Pero os tengo que confesar algo, he sido valiente y aunque antes os he dicho que es necesario decir "te echo de menos", hay ocasiones donde es mejor pensarlo antes de decírselo a alguien que no solo no te echa de menos, sino que no conoce el significado de esa expresión.
Espero no haberos aburrido tanto.

¡Buen fin de semana! 

viernes, 18 de septiembre de 2015

Se acabó

Y se ha acabado la semana...¡Por fin! Y es que han vuelto los ¡POR FIN ES VIERNES! ¡YA ES VIERNES! ¿Qué hacemos? ¿Dónde quedamos? Porque claro, parece que salir entre semana no es tan emocionante como salir un VIERNES. Así que después de una dura semana, donde he tenido que soportar nuevamente a la dura rutina, acostumbrándome a un horario que parece insoportable, viendo a unos compañeros/as que parecen simpáticos pero con quienes he dirigido pocas palabras o ni siquiera he hablado, mientras tengo que observar como cierta persona sigue con su vida sin más..., puedo decir orgullosa que sí, que por fin es viernes y estoy dándolo todo en MI CASA mientras veo la televisión. Parece ser que no estaba preparada para la rutina, para volver a la Universidad, así que he perdido un poco ese entusiasmo de los viernes, pero prometo recuperarlo. Tened en cuenta, que solo llevo una semana, cuando lleve dos...Bueno, ya os haré otra entrada sobre ello.
Ahora, dejando las bromas a parte, he de decir que ha sido una semana rara. Aún me acuerdo cuando escribí una entrada titulada , donde describía cómo me sentía ante un nuevo comienzo. Y la verdad es que tampoco ha ido tan mal, a pesar de ser una horario diferente al que estaba acostumbrada, cambiar un poco mi vida para adaptarme a él, o a que la mayoría de mis compañeros/as de los otros cursos, ya no estén en mi clase, no ha ido tan mal. He disfrutado de pequeños detalles, que creo que son los más importantes, así que ha merecido la pena. Pero claro, parece que toda cara tiene una cruz, o que todo lo bueno también lleva algo malo en el camino; y es que es difícil ver a ciertas personas que antes fueron especiales para ti o manejar ciertos sentimientos. Muchas veces pensamos que estamos preparados para algo, para afrontar ciertas cosas, para dejar de sentir por ciertas personas..., pero fíjate cómo es la vida, que un simple segundo es capaz de cambiarlo todo. Eso me ha pasado a mí esta semana. Pensaba que podía manejar cierta situación, y aunque creo que no ha ido del todo mal, no ha ido como me imaginaba. He sentido tristeza, una tristeza que no sentía desde Julio, una añoranza hacia alguien que no ha movido un dedo por saber de mí, pero se ve que ahí está la diferencia, que a pesar de la fuerza que tengo y que sé que puedo sacar, en la habitación de mi cuarto me derrumbo y me pongo nostálgica. Supongo que no seré a la única a la que los sentimientos le sobrepasan, así que sí, ES UNA GRAN PUTADA.
En fin, no ha sido mi mejor semana, pero bueno esperemos que esta haya sido la peor de los meses que están por venir.


lunes, 14 de septiembre de 2015

¡Hola!
Mañana es el día. Comienza un nuevo curso, el último si todo va bien. Se me encoge el corazón cuando pienso que es mi último año de carrera (graduación, viaje de fin de carrera, despedidas, trabajo...). Bueno, creo que todo eso se merece otra entrada, así que lo dejaré para más adelante.
Ahora mismo me debato entre las ganas y el miedo. Son dos sentimientos tan opuestos pero no puedo imaginarlos separados. Cuando pienso que mañana veré nuevamente a esas personas que aportan luz a mi vida, me invade la alegría y la ilusión por compartir nuevos momentos con ellas. Además, estoy segura que esos recuerdos se quedarán en mí para siempre y más cuando sé que el final se acerca...Sé que a la mayoría de esas personas no las vuelva a ver, pero también sé que quiero disfrutarlas mientras dure. Por otra parte, estoy segura que mantendré el contacto con las personas que hoy por hoy tengo el placer de llamar amiga/o. Y no porque sepa que estarán ahí después de acabar este ciclo, no quiera pasar tantos momentos con ellas/os. Es más, es con quienes quiero disfrutar más de estos meses. No obstante, también están esas personas a las que no quiero ver, con las que no me quiero cruzar..., pero sé que será inevitable, y de solo pensarlo me empiezan a temblar las manos y el corazón parece latir más deprisa. Y es en este momento donde aparece el miedo. Siento miedo por no saber si seré capaz de disfrutar de este año, por no ser del todo valiente y superar mis inseguridades...
En este momento, millones de preguntas se forman en mi cabeza, millones de dudas dan vueltas y vueltas, pero la más importante es ¿se puede sentir miedo y ganas por empezar algo? La respuesta está en el título de esta entrada. Me siento decidida, abierta a nuevas experiencias, deseosa de conocer a gente nueva, pero sobre todo de conservar en mi vida a la que me hace tan feliz. Puede que este año no sea el mejor, que las expectativas vuelvan a ser más grande que la propia realidad, pero no me voy a quedar con las ganas. Quiero hacer lo que sienta y cuando lo sienta, y principalmente, quiero acabar esta etapa de la mejor manera posible.
Mañana empieza una nueva aventura. ¿Estoy preparada? ¿Tengo ganas? ¿Iré a por todas? ¿Seguiré encontrándome cuando me pierda? Y por más que pienso, las respuestas siguen siendo el título de esta entrada.

sábado, 12 de septiembre de 2015

Un poco de música

¡Buenos días!
Hoy es día de música. Un día donde me siento tan cómodamente en mi sofá y escucho millones de canciones mientras relajo mi mente y dejo que vuele hacia donde quiera. Puede que alguna canción me haga soñar, otra tal vez me motive tanto que mis pies se muevan solos...¿Quién sabe? Millones de cosas pueden ocurrir cuando uno pone su canción, disco o cantante favorito en el equipo de música.
La música me da vida, me provoca tantos sentimientos, que a veces me da miedo, miedo por lo que puede llegar a provocarme. Y es que hay días donde mi cuerpo me pide canciones con las que me pueda volver loca y solo deje de bailar cuando me quede sin aliento; hay otros donde mi alma pide tanto un desahogo que necesito aquella canción que me ponga los pelos de punta y me haga llorar, porque lo necesito...Hay tantas canciones para ser escuchadas en tantos momentos y situaciones que me siento pérdida el día que no escucho ninguna.
Acabo de cerrar los ojos y me he dejado llevar, por esos acordes mientras la mente divaga, crea, transforma, e incluso te lleva a lugares en los que has estado, a personas a las que has querido o quieres,...Eso es lo que logra la música, nos hace sentir. Además, ¿no os ha pasado nunca que habéis escuchado una canción que en su momento os gustó, pero que ahora la entendéis? o ¿habéis sentido tal emoción por una canción que se ha vuelto vuestra? Y es que la música logra grandes cosas, convierte canciones en parte de nuestra vida, de nuestros recuerdos, etc. Hay veces que ni siquiera somos conscientes de que eso está pasando, incluso podemos sentirnos vulnerables cuando una música nos recuerda algo o alguien que hemos dejado ir y ya no está a nuestro lado, pero en definitiva, sabemos que esa canción nos ha marcado, que para bien o para mal, forma parte de nosotros.
Lo que quiero decir con todo esto es que la música está hecha por y para nosotros. Es más, pienso que sin la interpretación de cada uno, las canciones no serían nada. Es verdad que detrás de cada tema o notas se esconde un autor, alguien que ha puesto sus emociones y empeño en crear algo que para él significa un mundo, pues imaginad lo que debe sentir cuando esa canción ya no solo es suya sino también de alguien externo a su equipo, cuando consigue que esa canción forme parte de otras personas, que otras personas hayan logrado sentirse como él o ella en su momento...Y es que ahí es donde yo veo la magia de la MÚSICA.

Pablo López sonando mientras creo esta entrada :) 

miércoles, 9 de septiembre de 2015

Stephanie Perkins


La lectura. La lectura me apasiona. Soy capaz de coger un libro entre mis manos y devorarlo en un solo día. Leer es uno de mis hobbies favoritos, me parece entretenido y liberador. Millones de historias y sentimientos se esconden detrás de unos personajes y lo más maravilloso de todo ello, es que te puedes sentir enormemente identificado o incluso, puedes soñar con vivir un momento así.
Aunque me encantaría seguir hablando de aquello que siento cuando leo, creo que eso se merece otra entrada más exhaustiva. Hoy toca dedicarle unas palabras a una de las escritoras que más me ha fascinado en este mundo. Se trata de Stephanie Perkins. Lo que puede parecer una escritora normal o del montón, se convierte en una de las personas con más calidad de escritura que he tenido el placer de leer. Desde su primer libro, Un beso en París, no he podido encontrar hasta la fecha un libro que me haya entusiasmado y encantado tanto que sea capaz de leerlo millones de veces más y siga sintiendo lo mismo por él. Y lo más bonito de todo, es que esto no acabó aquí. Luego siguió, Lola y el chico de al lado, otra increíble historia que me envolvió con cada una de sus páginas. Y finalmente, llegó Felices por siempre jamás, cerrando una etapa de mi vida con tres espléndidos libros que no han dejado indiferente a muchas personas. Supongo que algún día publicaré la reseña de estos tres libros, porque necesito explicaros lo que he sentido con cada uno de ellos y en esta entrada, lo único que quiero manifestar es el amor que siento por la forma que Stephanie tiene de escribir, por como logra expresar cada uno de los sentimientos y emociones que en mi propia vida he experimentado, logrando que me sienta protagonista y parte de la historia. Por primera vez, en mucho tiempo, no soy una simple espectadora de un show maravilloso, sino que soy la interprete principal, la persona que da vida a ese personaje. Siento que sus vivencias son las mías, que sus valores son los míos, incluso que sus penas y alegrías son las que yo he sentido en algún momento de mi corta vida. Por todo esto, me siento orgullosa de esta autora, de lo que ha conseguido y de lo que ha sido capaz de dar a los demás.
¡Viva las historias que te hacen sentir! ¡Viva las historias que te hacen participe de ellas! 

martes, 8 de septiembre de 2015

Los comienzos

Los comienzos. Los comienzos implican cambios, nuevos retos, nuevas experiencias...y me parece precioso. Esto es lo que supone este blog para mí. Hace tiempo creé uno donde tuve la oportunidad de mostrar mi lado más friki, porque sí, lo tengo muy desarrollado. Estaba totalmente enganchada, subía publicaciones constantemente, hasta que entré a la Universidad y ahí fue donde todo cambió. Cada vez más gente empezó a visitar mi blog, habían más comentarios e incluso conocí gente maravillosa en todas las redes sociales que tenía para difundir mi página y tengo la suerte de poder decir que hoy en día algunos de ellos se han convertido en amigos. Lamentablemente tuve que dejarlo. La universidad y los cambios en mi vida estaban ocupando la mayor parte de mi tiempo. Aunque seguía actualizando y me apasionaba ocupar mi tiempo libre en ello, la cosa me sobrepasaba, por lo que decidí cerrarlo. A día de hoy no me arrepiento, fue un momento especial de mi vida (pensaréis que estoy loca, pero fue así). No obstante, ya ha pasado mucho de aquello y vuelvo con una nueva idea, crear otro blog pero totalmente distinto. Esta vez quiero que sea algo más personal, de ahí mi explicativa y larga primera entrada.
Con este blog lo que pretendo es mostrar lo que quiero y cuando quiero. No me interesa los altos números de visitas que reciba, ni la gran cantidad de comentarios (podéis dejadme alguno de vez en cuando que no me voy a ofender), quiero mostrar mis intereses, mis pasiones, mis sueños, pensamientos..., todo aquello que forma parte de mí. Y os estaréis preguntando, ¿para qué? Pues bien, porque a lo largo de mi corta experiencia en esto llamado vida, me he dado cuenta que a mi me ha ayudado/servido/he conectado/me ha gustado el conocer las experiencias de otras personas, el poder mirar el interior de cada uno. Por esta razón, decido volver nuevamente a este mundo. Pienso subir críticas de series , libros y películas, pero también daré mi opinión sobre diferentes temas o incluso mostraré las cosas que han logrado emocionarme.
Y bueno, para que nosos canséis tan rápido de mí, creo que por hoy voy a dejarlo aquí. Además, ni yo misma sé que más deciros, solo que esto es un nuevo COMIENZO.